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14 de febrero de 2020

Demasiada Candidez


Era aún demasiado cándido para el amor. Tenía catorce años. Mientras mis compañeros perseguían traseros, yo pensaba en jugar al fútbol y, de vez en cuando, en clases de física y matemáticas. Conforme se acercaba el 14 de febrero, una excitación embriagaba el instituto. Se formaban parejas artificiales con tal de sentirse querido por unos días. Aquel año, me tocó a mí. Sara, una de las chicas más populares, me escogió. No podía negarme. De repente, sentí que me había hecho mayor.

8 de febrero de 2020

Críticas Traidoras

Esta semana he estado hospedado en un alojamiento de la plataforma HellBnb. Debía asistir a una feria agrícola para publicitar nuestro estiércol doblemente biodegradable. Dentro de su austera política de gastos, la empresa predispuso una cantidad exigua para pasar la noche y la recomendación de cenar a base de los contenedores cercanos a los puestos ambulantes de la feria. A pesar de ello, encontré una habitación de un apartamento que las críticas describían como bien equipado, cómodo y limpio. Además, los antiguos huéspedes decían que el anfitrión era atento, formal y brindaba al huésped multitud de pequeños detalles. Sin embargo, los sistemas de críticas me la volvieron a jugar.

20 de enero de 2020

Anda suelto Satanás


Conseguir la salvación que anuncian las sagradas escrituras es una tarea repleta de peligros e improvistos, pero altamente estimulante para el anecdotario.
Como cada domingo, me atavié con mis mejores galas un mono embadurnado de aceite industrial y unos zapatos de payaso para asistir a misa de primera hora. Entre cabezada y cabezada meditaba acerca del dineral que debían invertir los hombres lobo en fotodepilación, de los que se habla más bien poco, cuando unas palabras del sermón me sacudieron. “Ronda por las calles una terrible amenaza. Desprende un azufre que corroe los valores que Dios legó a los hombres. Tened cuidado porque, a pesar de tener rabo, cuernos y tridente, sabe cómo seducir. Os hablará de orgías, drogas, banquetes y otros placeres superfluos. Hermanos, anda suelto Satanás”. El cura continuó con su intensa verborrea, aconsejando cómo combatir la presencia del diablo. Sin embargo, mi capacidad de atención era demasiado reducida para seguir escuchando. Por suerte el mensaje de alerta ya había penetrado en mis sentidos. Mi firmeza ante el enemigo sería infranqueable.

4 de enero de 2020

Serbia: El Corazón De Yugoslavia


Meses después de regresar de Serbia, no sé aún por qué acabé en tan singular país. Aparte de ser feliz, autorrealizarse y salir de la zona de confort, una de las preocupaciones contemporáneas es elegir destino vacacional. Ha de ser exótico y acogedor, que transmita su cultura a través de su gente y su gastronomía. Y, lo más importante, que permita saturar de instantáneas las redes sociales. No tenía claro si estas premisas se cumplirían en el caso de Serbia. A decir verdad, más allá de sus recientes refriegas bélicas, sus hitos en el mundo del deporte y las reminiscencias de tiempos pasados, del corazón de la antigua Yugoslavia no encontré excesiva información. Incluso tuve que comprar la guía turística en italiano. El atractivo del desconocimiento y el aislamiento, junto a unos billetes de avión a precio razonable, me convencieron para recorrer parte de los Balcanes en poco más de una semana.

31 de diciembre de 2019

Adiós 2019


A la par que lo hacen los días de este año, las páginas de mi libreta llegan a su fin. Tengo por costumbre almacenarlas en la estantería junto a sus hermanas más mayores, quizá más inocentes. Muy de vez en cuando nos observamos y celebramos en silencio los momentos en que las hojas, la tinta y mis ensoñaciones fuimos uno.

25 de diciembre de 2019

El milagro de Santa


Preveía la Nochebuena más anodina de mi bochornosa vida. Tras una serie de desafortunados incidentes relacionados con el protocolo y la corrección, mi familia había vetado mi asistencia a la cena a cambio de las cabezas de langostinos y los huesos de cordero sobrantes. Para la cena compré una pizza precocinada y me estiré con la marca del cartón de vino. Encendí unas velas e incienso que había tomado prestado de la iglesia y de fondo puse en bucle el clásico, injustamente defenestrado, ‘Santa Claus Llegó A La Ciudad’ de Luis Miguel. Además de un chaleco reflectante y unos pantalones de licra verde, me engalané con una diadema de reno y una nariz que emitía una siniestra luz roja.

23 de diciembre de 2019

Falaz Navidad


Descubrir una mentira es doloroso, pero con el tiempo se convierte en necesario y reparador. No solemos estar preparados para tolerar el engaño, asumir la falacia o convivir con la ira o el rencor. Cuanto mejor construido esté el embuste, más traumático se convierte el proceso para asumir la verdad. Hay mentiras que son piadosas, otras que son un reguero de pólvora esperando mecha y algunas sumamente resistentes e impenetrables. Cuando un niño forma parte de la ecuación, todos sus elementos se vuelven más sensibles y la capacidad de destrucción se torna imprevisible.

12 de diciembre de 2019

Casi todo igual


La indiferencia me brindó un cálido recibimiento en Austria. Fue en uno de esos puentes fijados en el calendario para aflojar las cadenas del trabajador. Esparcimiento en el que gastar los últimos céntimos del salario. Los algoritmos de los buscadores de vuelos propusieron Viena como destino. Las plataformas destinadas a compartir alojamientos turísticos ofrecían un techo económico. Me proponía explorar culturas recónditas, conocer diferentes formas de relacionarse, rastros de civilizaciones extintas, perderme en calles limitadas por arquitecturas medievales y rodearme de desconocidos que se comunicaran en un idioma indescifrable para mis oídos. Quizá pequé de idealista.

29 de noviembre de 2019

La matanza del artista


Me revolvía entre la gloria y la decadencia sobre un lecho de escombros y pomposidad. La ensoñación de entregar mi existencia al arte tocaba a su fin cuando un halo de realidad certero me atravesó.
Con mi última exposición se me antojaba haber alcanzado el culmen de mi carrera. Creía que hasta el más ignorante en la especialidad podría valorar la contundencia y el riesgo de mi obra. Recreé con barro todas las vísceras del cerdo: corazón, pulmones, esófago, gañotes, sesos, riñones, hígado y bazo. En mis tallas pretendía dejar patente un fondo maduro, un estilo reconocible y a la vez salvaje. Excepto el día de la inauguración, a la que acudieron algunos indigentes atraídos por los chuscos de pan y el vino peleón del piscolabis, sólo se congregaron un puñado de visitantes engañados por la guía de ocio local. No hubo ni rastro de galeristas, coleccionistas, curiosos, ladrones de arte, jubilados o excursiones escolares.

12 de noviembre de 2019

Sueños fritos

Ayer soñé que era una croqueta de puchero. Estaba hecho de hilos de pollo, tropezones de garbanzos y restos de tocino. Mi creador, el que me había cocinado en una sartén de aceite hirviendo, me servía en una bandeja junto con otros hermanos croquetas. Mi aspecto era inconfundible: tenía el cuerpo cubierto de costras negras por haberme frito de más. Con preocupación observé cómo el resto de croquetas desaparecían entre gritos de horror y yo permanecía sobre la bandeja. Nadie me comió y acabé en la nevera tiritando de frío. Cuando desperté del sueño, no sabía si meter mi cabeza en el microondas o lanzarme al contenedor de residuos orgánicos.

Por eso, en solidaridad con su terrible destino, he tomado una decisión: lloraré de cínica rabia cuando vuelva a devorar a una de mis deliciosas compañeras.

30 de octubre de 2019

El Vuelo Del Vencejo


Ayer mi agenda había una cita marcada en rojo. Como aspirante a malabarista de las palabras, acostumbro a hacer acopio de certámenes literarios en los que presentar mi candidatura. A pesar de la torpeza y la falta de talento, he cosechado una colección de historias que adapto a conveniencia de las bases. Sin embargo, hay una modalidad alternativa que también ocupa mi tiempo y descarría mis esfuerzos: los certámenes de temática específica o también conocidos como la selva. En ellos anidan elefantes, hienas, leones, chimpancés, oasis y excursionistas incautos como yo. Un ejemplo ilustrativo es el concurso de microrrelatos convocado por una multimillonaria petrolera para concienciar sobre el cambio climático y la desigualdad; o el certamen de relatos para patrocinar el jamón de Teruel, cuyo premio consiste en adoptar a un cerdo vietnamita.

18 de octubre de 2019

Haters y Mendigos



La primera vez que lo vi aparecer, supe que había llegado mi fin. Dicen que la carrera de todo artista tiene un momento de esplendor creativo máximo, llamado culmen, el cual precede al declive paulatino, la vergüenza ajena y la muerte. No necesariamente se suceden en ese orden. En el caso de Saramago fue la novela 'Todos los nombres', en el de Radio Futura su primer ensayo y en el de Gregorio Esteban Sánchez Fernández, más conocido como 'Chiquito de la Calzada', fue 'Aquí llega Condemor, el pecador de la pradera'.

13 de octubre de 2019

Deudas Sanas


Siempre he escuchado tópicos como "la edad pasa factura" o "los años no perdonan" con una actitud burlona, casi desafiante. Hace no tanto, atravesaba las noches sin apenas dormir. Regaba mis vísceras con gasolina, mis piernas danzaban sobre un mar de adrenalina y llegaba fresco a la mañana siguiente para labrar campos de almendros, ordeñar diez granjas de vacas, correr una maratón o atravesar el Estrecho de Gibraltar a nado. No sé en qué momento reciente todo cambió: los primeros plazos del crédito de salud que creía infinito habían vencido y mi cuerpo decidió empezar a saldar cuentas pendientes.

10 de octubre de 2019

Viajar pegados

"Perdone, pero se ha sentado usted en mi asiento", me dijo una señora desconocida de voz amable. Me mostró su billete y ambos comprobamos que habíamos sido asignados en el mismo asiento. La tripulación apremiaba a los pasajeros a sentarse, por tanto optamos por la opción más sensata: me senté en las piernas de la señora. Tras un viaje de cuatro horas, descubrimos que nos habíamos quedado pegados el uno al otro. Probamos médicos, alquimistas y magos, pero ninguno consiguió separarnos.

Sentados, en un nuevo viaje, un nuevo desconocido nos ha interrumpido: "Perdonen, pero se han sentado ustedes en mi asiento".

24 de septiembre de 2019

Fama Fantasma


Desde que me mudé de casa, he sido víctima de los antojos y extravagancias de una familia de muertos. La vivienda era modesta y los techos de basta altitud remarcaban su antigüedad. Además de la cercanía al centro y al puesto donde calentaba el culo, al que entre mis allegados me refería como trabajo, me atrajo su ínfimo precio. Al parecer la vivienda llevaba vacía diversos años y los intentos por buscar inquilinos habían sido infructuosos, desatando la frustración y el enojo entre dueños e inmobiliarias.

3 de septiembre de 2019

Así En El Cielo


Os presento un nuevo relato 'Así En El Cielo', relato incluido para el especial Fin Del Mundo del boletín literario valenciano Papenfuss. En dicho especial se recoge un espectacular plantel de escritores que han escrito unos relatos impresionantes. Pinchando este enlace podéis acceder a la versión digital del número especial. También podéis leerlo en las siguientes lineas...

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Aquella mañana amanecí maldiciendo al móvil por no haberme despertado a la hora que él y yo habíamos acordado. Eran cerca de las diez y debía estar exponiendo una serie de datos que había maquinado la noche anterior ante nuestro principal cliente. El cliente en cuestión estaba representado por un señor que pasaba la cincuentena, con aspecto de santurrón, el cual poseía una barriga hipnótica que escapaba de los límites que le marcaba su camisa de raya diplomática. Durante una hora cada dos semanas, le presentaba una retahíla de resultados y gráficas que ni yo mismo entendía, tratándole de convencer de que los beneficios de su negocio crecerían con nuestra ayuda y de que continuara apoquinando y confiando en nuestra seria y reputada empresa. Él solía asentir sonriente y, una vez satisfecho, me invitaba a atiborrarnos de platos de jamón y rebujitos en un local colmado de imágenes de vírgenes y hombres crucificados, hasta que éste caía noqueado. Cariñosamente, le llamábamos el Cerdito Piadoso.

27 de julio de 2019

Despedida En La Granja


Este pasado fin de semana estuve en mi primera despedida de soltero. Se trataba de la protagonizada por uno de mis grandes amigos: Oso Jones, al cual conocí cuando ambos cursábamos económicas en la universidad. Él había venido en un programa de intercambio entre osos pardos de Alaska y colibrís locales que iban a aprender inglés en sus gélidas praderas. Tras probar nuestro suave clima y el salmorejo, el rebujito y las fiestas flamencas, Oso Jones se enamoró de una muchacha de por aquí, fue correspondido y decidió establecerse definitivamente por estos lares.

23 de julio de 2019

Fiebre de la Opulencia Moderna y el Ostracismo (FOMO)


Tengo la sensación permanente de que hay algo que me estoy perdiendo. El tiempo pasa y yo me lanzo decidido contra él. Trato de abarcar toda su extensión y exprimir cada uno de sus segundos como si de una naranja se tratase. Sin embargo, siempre caigo derrotado, extasiado ante su persistencia y ahogado por las manecillas del reloj.

12 de julio de 2019

La Ciencia de la Vergüenza Ajena


Ir de congreso es una aventura comparable a convivir con una tribu de la selva africana.
Cargado de ilusión, con ganas de aprender y compartir mi humilde conocimiento, empaqué mi petate y crucé medio país y parte del extranjero en avión, tren, autobús, blablacar y, finalmente, autostop en un camión cargado de ganado porcino. Al llegar a la ciudad del evento, diluviaba a cántaros y el lujoso hotel que me había reservado la organización, estaba localizado en lo alto de una colina, a una media hora de distancia a pie. Completamente empapado entré en la recepción. Allí me indicaron que, a pesar de contar con unas encantadoras vistas de la frondosa región, mi habitación estaba situada en el sótano debido a un percance de última hora. Además, me avisaron de que como el armario de mantenimiento estaba situado en mi habitación, el conserje, el jardinero y el servicio de limpieza podrían entrar a cualquier hora del día o de la noche a mi habitación. El cuartucho no tenía ventanas y no cesaba el estruendo de los comensales revoloteando por el salón. El colchón estaba tan vencido que me recordaba a una de las colchonetas donde saltaba de niño en la feria de mi pueblo.

23 de abril de 2019

Paredes

Hay veces que es necesario observar detenidamente a las paredes. Refugiarse en su cálido silencio, ser liso como su tacto, pintar la mente con su blanco y contagiarse de su aparente sencillez.

Entre el yeso y el ladrillo descubro que hay veces que es necesario preguntarse en lugar de contestar.