21 de agosto de 2012

El Cajón De Las Pasiones


Invisibles para la mirada superficial, se reservan sus encantos para el sexo humeante. Concebidas para un arrebato de placer solitario, te seducen desde la esquina de un borrón ficticio. Hijas del fulgor hecho suspiro y la vesania ebria de lucidez, se retuercen caprichosas como la más puta de todas las doncellas, enigmáticas como la más estrecha de las plebeyas, sólo reales en un cajón que nadie cercó de fronteras. Un rincón que embriaga a cloaca y apesta a elegancia, con tacto de lija y envoltura de seda. Una guarida engalanada por los remates anárquicos y un orden que reina despiadado, donde los contrastes dan sentido a la vida y la muerte luce con alegría, de oscuridad al amanecer y madrugadas de claridad, de sombras que se tornan color y tintes que en tiniebla nacen. En ese demencial agujero, veo brotar la salida hacia mí y la entrada hacía ellas, noto cómo escapa el terciopelo y cómo se queda la aspereza. Allí, juego a domar el sueño y hacer salvaje la realidad, ironizo con lo falso  y me sobrecoge lo que cuentan que es verdad, trato de adivinar lo que algún día fue y a teñir de cierto lo que nunca vendrá.


Al notar la primera luz del día, me empujan sin compasión para que talle el refugio que siempre habitarán. Me disparan hasta que les funda en mi embrujo, me fuerzan a recorrer sus cuerpos desnudos tratando de excitarlas, a que susurre disparates que las calienten, a que las adorne con lentejuelas y espejos, a que las enloquezca a la espera, a que las torture con ternura. Te incitan a la demencia voraz, te sumergen en la emoción clandestina, te persiguen hasta situarte en esa estrecha línea que separa la plenitud del vacío. Al borde del filo, se masturban hasta extraer del amor una cuchillada y del odio una caricia, gimen desbocadas al encontrar un equilibrio que no se sostiene y un descontrol que sucede a la perfección, y terminan por explotar en un alarido cortante si se ve a la mentira disfrazada de verdad y a la realidad en cueros mostrando lo irracional.

Trago saliva, respiro hondo y le entrego cautivo mi mano y mi sudor. Me esfuerzo por ser generoso y no muy pretencioso. Intento que las demás no marchiten, que no encelen a la desespera, que no sientan el abandono forzado, que los grilletes con los que decidí apresarlas no las lastimen. Espero que el polvo que las va sumiendo no las aparte de mi memoria, que el polvo que nos prometimos brindar no sea un trámite más, y que si alguna de ellas ha dejado de ser pura, encañone a una de las santas y se cuelgue la aureola de virgen. No quiero saber de su pasado, ni de las plumas que ya la han cepillado, me contenta el engaño de ser el primer y su único amo. Suspiro al dejarme llevar por la elegida y le prometo al oído que será hasta la última consecuencia. En ese momento me siento igual que el esclavo al que los latigazos avivan, como el beso que por ser último se hace eterno y como ella cuando se acuerda de estos labios.

Al final cedo derrotado por el placer, victorioso ante el sufrimiento, exhausto de embustes y hastiado de saber. La repaso con la mirada en silencio mientras reposa en mi pecho. Palpo sus poros todavía líquidos, percibo su respiración acelerada, me derrito ante las curvas imperfectas que mi torpeza lamió, la cabellera que indómita cae con mil reflejos, su culo casi redondeado, sus tetas amoldadas al tamaño de mis dedos, su espalda que sinuosa sugiere amparo, sus labios, los de arriba y los de abajo, que anhelan por el siguiente ímpetu. “No puedo más”, me digo. Me levanto y me visto, me acerco a su cara y conteniendo la emoción le murmullo: “me voy para siempre. Eres libre del cajón de las pasiones”.



----------------------------------------------
Fuentes de Inspiración:

La Vida Es Bella - Roberto Benigni (película).
Y Sin Embargo - Joaquín Sabina (canción).

Las Musas - La Fuga (canción).
Palomas - D'Callaos (canción).
A La Luz De Una Sonrisa - Gritando En Silencio (canción).
Drip Pop - La Cabra Mecánica
(canción).

No hay comentarios:

Publicar un comentario